Mientras las universidades salmantinas ganan alumnos cada año, los centros educativos donde se imparte la enseñanza obligatoria los pierden paulatinamente por el descenso de la natalidad. La concertada este curso ha comenzada con más de 15.000 alumnos en Salamanca, lo que supone el 32 por ciento del total de la provincia. Entre sus reivindicaciones siguen figurando mayor financiación y una mayor oferta de FP.