El planeamiento urbanístico es una herramienta fundamental para el diseño de los municipios hacia el futuro. Pero tiene un problema particularmente para los más pequeños: su alto coste. Por eso, la Diputación de Salamanca ha anunciado hoy que multiplica por 5 su presupuesto para este fin, alcanzando los casi 900 000 euros. Es una acción dentro de la estrategia de generación de oportunidades y contra la despoblación.