La inmensa mayoría de los contagios son leves, pero siguen llegando a las UCI no vacunados y enfermos de riesgo por culpa de la COVID-19, aunque por primera vez en un mes notamos un ligero descenso.

En el Hospital Río Hortega de Valladolid hay 22 camas en la UCI y 18 de ellas están ocupadas por pacientes COVID. Un 70% de ellos tienen entre 60 y 65 años y están vacunados. Son enfermos crónicos: "Pacientes con diabetes, con obesidad, con enfermedades patológicas...", indica el médico Pedro Enríquez. Muchos de ellos llegan por otras dolencias y dan positivo como asintomáticos. Solo en el Hospital Clínico de Valladolid, estos ingresos suponen el 25% de los 67 pacientes en planta con coronavirus. Los ingresos son ahora una decena al día.

El centro sanitario tiene un plan de emergencia para extender la UCI al área de reanimación. Ahora mismo, la unidad de críticos vive momentos complicados por las bajas del personal, sobre todo, en Enfermería. El paciente que ingresa en planta con COVID pasa menos días en el hospital que en otras olas excepto los no vacunados, según destaca el coordinador del Hospital Clínico de Valladolid, Carlos Dueñas.