Una mina con casi 100 años fue durante mucho tiempo el mito de la minería leonesa, donde todo empezó. El Pozo Viejo abrió las entrañas de la tierra en 1928 y consiguió acceder a la mítica capa Fabero Primera, todo un mito en la minería de la época de donde salió el mejor carbón de España, que calentó las casas de las familias más pudientes de Madrid. Un grupo de mineros se adentra para conocer su actual estado y analizar la posibilidad de convertirlo en un destino turístico que mantenga viva la llama minera de León.