Vertidos descontrolados, escombros, artes de pesca ilegal... los ríos de Castilla y León están continuamente amenazados por la acción del hombre. La patrulla del Seprona de Riaño se encarga por velar para que las aguas de sus cauces estén a salvo de la irresponsabilidad del ser humano. Una jornada junto a los agentes de la Guardia Civil permite comprobar cómo luchan por la salvaguarda del medio natural.