La Adrada, testigo del paso de los siglos son su Castillo, la Iglesia y los numerosos molinos, fábricas de papel y batanes. Son sus calles del casco antiguo las te sitúan en otra época, en otro tiempo, como si por allí éste se hubiera detenido.
En la actualidad el patrimonio más importante de La Adrada es su medio ambiente, resultado de la ubicación geográfica y su clima. Rodeada de magníficos bosques con distintas características ecológicas y botánicas: pinares, encinares, castañares y robledales.