Una nueva escapada en la que el programa irá a la provincia de Burgos, porque bajo el suelo de Aranda de Duero existe todo un laberinto de bodegas subterráneas. Constituyen una red de 7 km de túneles o galerías excavados entre los siglos XII y XVIII, a una profundidad entre 9 y 12 metros, que se encuentran en su casco histórico. Esta villa fue uno de los principales productores de vino del norte de España. De las más de 300 que hubo, actualmente se conservan 135. Se introducirá en este entramado y contará la historia de una de las piezas fundamentales con las que cuenta el patrimonio arandino y bien de interés cultural.