Estos días miles de estudiantes deciden qué hacer en el futuro. Elegirán en su mayoría entre la Universidad o la Formación Profesional, que en los últimos 5 años ha crecido un 7 por ciento en Castilla y León y suma ya 46.000 alumnos, frente a los 90.000 que cursan algún grado, master o doctorado en la universidad.
En su decisión pesarán las oportunidades laborales y la nota de acceso. Casi el 83% de los estudiantes salidos de la Formación Profesional trabaja a los 3 o 4 años de la graduación, una cifra que no se alcanza antes de los 5 años en el caso de los graduados universitarios. Buscando la estabilidad son cada vez más los jóvenes que deciden opositar.
Con las miles de plazas que se convocan cada año, las academias viven un boom de alumnos. Analizamos las salidas laborales de los jóvenes con una emprendedora nata que tiene en la robótica y la tecnología uno de sus propósitos, también impulsar las vocaciones científicas y tecnológicas entre las niñas, Verónica Pascual Boé.