El plan de reestructuración de Bankia supondrá, en un primer momento, el cierre de 40 oficinas de su red comercial en Castilla y León, una cifra que se incrementará cuando se complete la negociación para el diseño de la red comercial de la provincia de Ávila, algo que debe producirse en las próximas semanas, según informaron a la agencia Ical fuentes sindicales.

Segovia es la provincia más afectada por este plan de reestructuración ya que perderá 15 oficinas y dejará su red comercial en 55, si bien se producirá un un incremento del número de despachos, es decir pequeñas instalaciones que sirven para pagar tasas y otras operaciones pequeñas, que pasarán de los 12 actuales a 21. A falta de conocer lo que ocurrirá en Ávila, la siguiente provincia en afectación será Valladolid, donde se cerrarán seis oficinas y León, con cinco. Salamanca perderá cuatro; Burgos, Palencia y Zamora, tres y Soria, una. Bankia no ha comunicado aún el número de trabajadores que se verán afectados por este plan en la Comunidad.

Bankia cerrará un total de 15 oficinas de su red en la provincia de Segovia. Así, en la capital se clausurarán definitivamente las oficinas del Centro Comercial Luz de Castilla, El Sotillo y la Urbana 11, ubicada en Nueva Segovia, que se suman a la ya cerrada del Hospital General. Además, también se efectuó el cierre de la sede de José Zorrilla, de Caja Madrid, por solapamiento.

En la provincia, el cierre definitivo afectará a las localidades de Torrecaballeros, Zarzuela del Pinar, y Fuenterrebollo, municipios de menos de 600 habitantes que mantendrán los cajeros durante tres meses y se estudia la incorporación de los dos ‘ofibuses’ de los que dispone la entidad.

Por solapamiento también se efectuó con anterioridad el cierre de las sucursales de Caja Madrid en La Granja de San Ildefonso y El Espinar, y a ellas habrá que sumar el cierre parcial de otras 7 oficinas en la provincia en los que se estudia, según señalaron fuentes de Bankia a la agencia Ical, la implantación de la ventanilla desplazada, que con horario limitado, operará dependiendo del número de volumen de clientes, un día o más a la semana con sus funciones habituales.

En Valladolid, se cerrarán seis de las 18 oficinas con las que cuenta en la provincia de Valladolid, tres en la capital, las de Bajada de la Libertad y Parque Alameda de Caja Madrid, y la de Bancaja en Fuente Dorada; y otras tantas en Medina del Campo, Santovenia de Pisuerga y La Cistérniga. Fuentes sindicales explicaron a Ical, que estos cierres podrían afectar a entre 28 y 30 trabajadores de la entidad en la provincia vallisoletana.

En León está previsto el cierre de una de las seis oficinas que tiene Bankia en la capital, mientras que se cerrarán dos de las cuatro de Ponferrada y también la de Astorga y La Bañeza.

La provincia de Burgos verá como se eliminan dos oficinas en la capital y una en Miranda, con lo que la red pasará de 10 a siete despachos. En Salamanca, se cierran cuatro. De ellas tres corresponden a Peñaranda, Béjar y Ciudad Rodrigo y una en la capital que fue la que surgió de la integración del despacho que tenía en la capital charra Bancaja y Caja de Ávila. En esta provincia, se mantendría la red que en el pasado tuvo Caja Madrid.

En Palencia se mantendrán las tres de la capital, pero cerrarán las de Torquemada, Aguilar de Campoo y Guardo, mientras que en Zamora se mantendrán también las dos que correspondían a la antigua Caja Madrid en la capital y cerrarían tres: la de Bancaja de la capital y las de Benavente y Toro. En Soria, permanecerá la de la calle del Ferial y se cerrará la de Zapatería.