Siempre cercana y sonriente en público, la vida de la Reina Sofía puede no haber sido el camino de rosas que se presupone para un miembro de la Familia Real. Así lo afirma 'La Soledad de la Reina', su biografía escrita por la periodista Pilar Eyre y que esta semana ha salido a la venta.
Relata los años difíciles de la infancia y juventud de la Reina, exiliada de Grecia tras las segunda guerra mundial y con la casa real helena casi sin recursos. Todo cambió con su matrimonio con el Rey Juan Carlos, entonces Príncipe. Según el libro, los tiempos bajo Franco fueron los más felices de la vida conyugal de la Reina, con Don Juan Carlos unido a ella las 24 horas del día.
La sorpresa en la cacería
Muerto el dictador se rompió la estabilidad del matrimonio. Según un testimonio recogido en el libro por entonces al Rey comenzaron a ofrecérsele todas. En 1976, la Reina fue con sus hijos a visitar por sorpresa a Don Juan Carlos a una cacería en Toledo. La sorpresa se la llevó ella, pues al parecer el monarca ya estaba acompañado. A partir de entonces cambió la vida del matrimonio, que se instaló en dormitorios separados en el Palacio de la Zarzuela. Siempre según el libro, al Rey no le molestan los rumores que se han disparado desde entonces sobre sus presuntas relaciones. Cree que ser mujeriego puntúa a su favor de cara a los españoles. Mientras, a Doña Sofía se ha refugiado en el estoicismo: son décadas de la soledad de la Reina.