La Compañía Eléctrica de Tokio (TEPCO) ha reanudado las tareas de refrigeración en el reactor número tres de la central nuclear de Fukushima-1, horas después de que tuvieran que ser suspendidos debido al humo negro que emanaba de sus instalaciones, según informa la agencia de noticias Kiodo.
La eléctrica ha asegurado que ya no existe peligro alguno para los operarios que desde el pasado 11 de marzo, cuando un terremoto de nueve grados en la escala de Richter sacudió la costa noreste, trabajan sin descanso para estabilizar el reactor y evitar una fusión parcial de su núcleo
El humo fue detectado a las 4.20 del jueves (hora local) y apenas 30 minutos después ya había desaparecido, sin que se haya podido determinar su origen, aunque se ha descartado la existencia de un incendio, según ha indicado la Agencia de Seguridad Nuclear de Japón. En un primer momento, fue necesario evacuar a los empleados de la planta por el riesgo de contaminación radiactiva.
El más problemático
El reactor número tres es uno de los que más problemas presenta por su elevada temperatura. Al igual que los otros cinco, ya ha sido conectado a la red eléctrica, con lo que se espera agilizar las tareas de enfriamiento mediante el bombeo de agua.
Entretanto, el Ministerio de Ciencia continúa monitoreando los niveles de radiactividad en tierra, mar y aire en un radio de entre 20 y 60 kilómetros en torno a la central. Algunas trazas de contaminación han sido detectadas en el suelo y en el agua marina que baña las costas de Fukushima.
La población ha sido evacuada en una horquilla de 20 kilómetros, por lo que ahora la preocupación se centra en las consecuencias del desastre nuclear sobre la industria agropecuaria y pesquera de la región, cuyos productos están siendo objeto de serias restricciones a la importación en los países de destino habituales.
Los reactores 1, 2, 3 y 4 desprenden vapor
Helicópteros de la televisión estatal NHK han podido comprobar este fenómeno desde el límite del perímetro de seguridad en torno a la planta, fijado por las autoridades niponas en un radio de 30 kilómetros.
Esta es la primera vez que el reactor uno emana vapor, mientras que los dos, tres y cuatro ya habían sufrido episodios similares.