El Ejército egipcio ha prometido este lunes que no recurrirá al uso de la fuerza contra los miles de ciudadanos que se están manifestando contra el presidente Hosni Mubarak para pedir su dimisión, al tiempo que ha reconocido como "legítimas" sus demandas.
En un comunicado, el estamento militar afirma asimismo que "la libertad de expresión" está garantizada para todos los ciudadanos que empleen medios pacíficos para manifestarse.
Esta es la primera confirmación explícita de que el Ejército no disparará contra los manifestantes que se han echado a las calles de El Cairo y otras ciudades del país desde el martes pasado para tratar de forzar la dimisión de Mubarak, como ha ocurrido en Túnez.
"La presencia del Ejército en las calles es por vuestro bien y para garantizar muestra seguridad y bienestar. Las fuerzas armadas no recurrirán al uso de la fuerza contra nuestro gran pueblo", reza el mensaje.
"Vuestras fuerzas armadas, que son conscientes de la legitimidad de vuestras demandas y están dispuestas a asumir su responsabilidad en la protección del país y los ciudadanos, afirman que la libertad de expresión por medios pacíficos está garantizada para todo el mundo", añade el comunicado.
Así las cosas, los militares instan a los ciudadanos a que no recurran a actos de sabotaje que violen la seguridad y destruyan propiedades públicas y privadas y advierten de que no permitirán que se saquee, ataque y "aterrorice a los ciudadanos".