Estas elecciones veremos caras nuevas, pero también habrá en las papeletas candidatos de toda la vida. Es el caso de Tarsicio Carballo, en Ponferrada, y de Francisco Iglesias, en Zamora. Entre los dos suman una veintena de elecciones. Muy atrás quedan sus inicios en los 80, aunque verán que no pierden la ilusión.

Después de tanto tiempo, para Carballo es imposible no emocionarse. "Ha llegado el tiempo de que hay que olvidarse un poco de uno y de atender a la familia", responde durante una entrevista.

Para eso aún puede quedar unos años, aunque es consciente de que podría ser su última contienda. Desde 1983, lleva 11 elecciones a sus espaldas y hay peticiones en El Bierzo que aún siguen siendo válidas.

La edad no es un impedimento para hacer política de calle, entregar panfletos, hablar con sus vecinos. Todo para igualar el mejor resultado del Partido Regionalista de El Bierzo, cuando se convirtieron en la tercera fuerza de Ponferrada.

Francisco lleva también más de media vida en política: diez elecciones municipales, nunca ha conseguido representación, pero aun así no se rinde. "Nos motiva ver que cada día podemos hacer algo, para ser útiles, no estamos aquí puestos por el ayuntamiento", comenta a los micrófonos de Castilla y León Televisión.

Considera que su trabajo es clave porque "vemos que está decaído, porque se nos va la gente y porque la industrialización ha fallado en la zona". Aspira a ser el alcalde de Zamora con el partido que fundó, el PREPAL, pero "si la salud se lo permite" no descarta volver a presentarse a las generales de diciembre.

Ambos son todo un ejemplo de resistencia, ilusión y pasión por la política.

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