La plantilla de Seda Solubles procedió este miércoles en distintos turnos a cortar el paso de camiones de las factorías de Palencia y Villamuriel de Cerrato, ya que la dirección de la empresa decidió desde el martes la salida de los centros de producción de ocho camiones, a los que este miércoles iban a sumarse otros seis, cargados con materia prima –café verde para procesar- y producto ya envasado.

El Comité de Empresa entiende que la medida es "ilegal" y ha presentado una denuncia en el Juzgado de lo Mercantil al entender que la mercancía que se ha sacado de los dos centros de producción puede garantizar salarios pendientes, una vez que se ha admitido a trámite un concurso de acreedores forzoso. Al respecto, los sindicatos reclaman el nombramiento de gestores independientes en el proceso de administración concursal.

"La fábrica de Palencia está parada la no haber suministro de gas y sólo una línea ha envasado producto en Villamuriel, pero no venos normal que se lleven el café verde aún por procesar y el que ya está envasado. Esta mercancía estaba en depósito ya que no hay actividad desde hace semana y media y es un activo de la empresa que tiene que estar bajo control judicial", concretó la secretaria del Comité de Empresa, Rosario Bueno.

Mañana está prevista una segunda concentración ante la Audiencia Provincial para pedir al Juzgado de lo Mercantil que designe gestores independientes que puedan garantizar el futuro de la compañía agroalimentaria y su solvencia financiera. Los sindicatos tienen previsto celebrar a continuación una asamblea con la plantilla para informar de todas las gestiones y acontecimientos que se produzcan en torno a la situación que vive la empresa, que afronta un ERE rotario desde el pasado mes de agosto.

La primera movilización se llevó a cabo el pasado jueves para pedir que la autoridad judicial inicie de forma urgente los trámites del concurso de acreedores forzoso presentado por las entidades bancarias extranjeras Paribas, Rabobank y Natixis, las principales acreedoras de Seda al no haberse hecho frente a créditos por valor de 21 millones de euros.

Dos centenares de trabajadores se dirigieron también a las puertas de la Delegaciòn de la Junta, para que inste a la dirección de Seda a presentar un plan de viabilidad que garantice los 314 puestos de trabajo entre las plantas de Palencia y Valladolid y las oficinas comerciales de Madrid. El Gobierno regional está dispuesto a avalar un crédito de dos millones de euros a cambio de la compañía, a la que se considera viable, elaborando antes un plan de negociación de su pasivo que permita afrontar el futuro con garantías.