Esta semana asistimos al duodécimo intento de la democracia en el que un candidato trata de ser investido presidente en el Congreso. Pedro Sánchez lo hace en un pleno que se extenderá hasta el viernes por la noche. Iniciará el trámite este martes por la tarde con un discurso para el que no tiene límite de tiempo.

El miércoles será el turno del debate con los líderes de cada partido. Hablarán en orden de mayor a menor de forma que comenzará Mariano Rajoy y terminará el Grupo Mixto, antes del último turno de palabra para el partido del candidato, en este caso el PSOE. Cada portavoz tendrá 30 minutos de intervención y diez de réplica en su cara a cara con Sánchez, mientras que el aspirante a La Moncloa no tiene tiempos fijados. Cuando acabe, previsiblemente ya por la noche, se procederá a la primera votación, en la que el postulante necesita mayoría absoluta.

Segunda votación

Si como todo apunta no la consigue se reanudará el pleno el viernes por la tarde. Habrá un debate más breve, con diez minutos para Sánchez y cinco para cada portavoz, y tendrá lugar la segunda votación, en la que el candidato necesita más síes que noes.

En las diez legislaturas precedentes sólo se ha recurrido a la segunda votación en dos ocasiones: en en la segunda de José Luis Rodríguez Zapatero, el único Gobierno con mayoría simple, y en la de Leopoldo Calvo Sotelo, interrumpida por el golpe del 23F.

La mayoría en primera votación

El resto se han resuelto en la primera, cuatro con el apoyo de los nacionalistas, como hizo Rodríguez Zapatero en 2004, José María Aznar en 1996 y Felipe González en 1989 y 1993. El resto se han resuelto con amplías mayorías absolutas, como la de Adolfo Suárez en 1979, las de González en 1982 y 1986, la de Aznar en 2000 o la que consiguió en 2011 Mariano Rajoy, quien ya es un veterano en los debates de investidura. Es la cuarta vez que participa en un trámite que ya ha vivido en tres ocasiones, una como candidato y dos en la oposición.