La escasez de materias primas, ya se lo hemos contado en otras ocasiones está afectando a todos los sectores de la economía, y no escapa a uno de los engranajes clave de la cadena: la industria de la fundición. Los costes se han disparado en las últimas semanas.
Hoy nos fijamos en la industria manufacturera. Los ingredientes de los que parten muchos metales está desbocados. Por ejemplo el magnesio que ha multiplicado por ocho el precio de su tonelada. Hay escasez de materiales a la que se suma la lentitud a la que llegan: dependemos prácticamente en la totalidad de la importación y el colapso logístico está retrasando los envíos. Muchas empresas están registrando pérdidas y la previsión es que esto todavía dure.