El gran Marcel Duchamp tenía una maleta repleta de obras de arte, al igual que los niños y niñas que participan en la escuela de verano del Patio Herrreriano de Valladolid. Cada día conocen ' in situ' la obra de un autor. Nos lo cuenta Pablo Coca, coordinador de Educación del Museo. " Intentamos en todo momento que los niños vean el arte como algo más de la vida y como una herramienta también de interpretación de la realidad".
A través de sus miradas, se suceden las pinceladas y los bocetos repletos de imaginación. Una forma de aproximarse al arte contemporaneo de forma lúdica y divertida. Un aprendizaje que ha propiaciado que ya tengan sus autores favoritos.