Las rutinas de Pilar cambiaron de golpe con el incio del estado de alarma y eso repercutió en su conducta. El centro de día, Zumba, educación para adultos. Todo se paró y Pilar comenzó a estar intraquila. Han hecho manualidades y todo tipo de actividades, lo que para su madre ha significado no tener vida en tres meses. José nos cuenta a quién echa en falta. Él,de momento, no se va a incorporar al centro de educación especial porque está tranquilo en casa.