Son muchos los jóvenes que, por distintas razones, abandonaron sus estudios antes de tiempo. Sin embargo, muchos deciden volver a clase para completar esos estudios que no finalizaron, o bien, seguir formándose para aumentar las posibilidades de encontrar un empleo. Lo hacen a través de los Centros de Educación para Adultos (CEPA), donde, de forma gratuita y voluntaria, acuden para sacarse una titulación oficial que no poseen. Estos centros no entienden de edad. Allí conviven en las mismas clases desde jóvenes con 18 años hasta mayores de 65 años.

Aquí les ofrecen la posibilidad de adquirir las competencias básicas y, en su caso, las correspondientes titulaciones como la de Educación Secundaria Obligatoria o prepararse para pruebas de selección o exámenes que les permitan acceder a la universidad. También acuden a estos centros aquellos que quieren aumentar sus conocimientos para optar a un trabajo mejor o mejorar el que tienen.

La tasa de abandono escolar temprano en la comunidad se ha mantenido en 2023 en el 9,9%, lo mismo que el año anterior, y sitúa a Castilla y León como la cuarta mejor de España, encima incluso de la media nacional, establecida en el 13,6%, y muy cerca de la media europea, del 9,6%.

Nuestra comunidad cuenta con 72 CEPAS y, solo en el curso anterior, se matricularon 2.334 jóvenes de entre 18 y 25 años en busca de una segunda oportunidad. 

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