EMPRENDEDORES

De recorrer obras, a diseñar invitaciones de boda

  • La empresa de construcción donde trabajaba Laura cerró por la crisis y ella decidió reinventarse con éxito

Rubén Hernández

La historia de Laura, en principio, no es distinta a la de muchos emprendedores. La empresa donde trabajaba no resistió a la crisis y ella, sin perder tiempo, decidió montar su propio negocio. Lo que hace diferente su caso es la ocupación elegida, el diseño de invitaciones de boda, una actividad que hasta entonces no pasaba de afición.

Ahora, un año después, el balance de esta aventura no puede ser más positivo. Laura no solo se ha hecho un hueco en el mercado, sino que además ha logrado cuadrar las cuentas. Lo ha conseguido gracias a una planificación muy estudiada desde el inicio donde los gastos superfluos fueron eliminados por completo.

Hoy, en su estudio gráfico (Bydesing se llama) los clientes no faltan, sobre todo en esta época. Además, ella no sólo se dedica a las invitaciones de boda y también realiza trabajos para empresas. La apuesta de Laura, de momento, no ha podido ser mejor elegida.