Un día después del acuerdo para el gobierno de Unidad nacional para acabar con la crisis política en Honduras ha aparecido otro obstáculo para el pacto. El texto contempla que el Congreso se pronuncie sobre la restitución de Manuel Zelaya, pero la Cámara podría no reunirse hasta después de las elecciones del 29 de noviembre.
Tras casi medio año de incertidumbre, las dos partes en conflicto han alcanzado un pacto para salir de la crisis bajo la tutela y la presión de Estados Unidos, pero su contenido íntegro apenas ha durado 24 horas.
El gobierno de facto ha anunciado la vuelta al 'statu quo' anterior a la firma, la prolongación del encierro de Zelaya en la embajada brasileña al menos un mes más. ¿La razón? Que al estar en periodo preelectoral el Congreso hondureño no puede reunirse para debatir la restitución de Zelaya hasta que se celebren los comicios.
Ambas partes han acordado que el próximo 5 de noviembre estará conformado un Gobierno de Unidad Nacional. Manuel Zelaya se ha comprometido a no tratar de modificar la Constitución si regresa al poder, lo que fue uno de los detonantes del golpe de Estado del pasado junio.