Los municipios vulnerables por contaminación del terreno a causa de nitratos han aumentado en la provincia un 40%. Si los niveles no se controlan podrían suponer un riesgo para la salud humana en no mucho tiempo. Es el caso de Liceras, que lleva tres años sin agua potable.

Hace tres años, se detectó en el agua del municipio una cantidad de arsénico superior a la permitida. Desde entonces, se suministran con este depósito de cinco mil litros de capacidad.

Ahora mismo viven aquí 30 vecinos. Pero advierten que a partir de ahora comenzarán a llegar más. Y no es solución para todos. De la redacción de un proyecto, que incluye canalización, un pozo y un depósito, se debería estar haciendo cargo la Junta, pero:

Los municipios de Ágreda y Ólvega superan los niveles de nitratos permitidos por la Unión Europea. Y San Pedro Manrique y Cihuela han aumentado su riesgo. Eso significa que los dueños de las explotaciones agrícolas deberían adaptar sus procesos de producción a unas buenas prácticas. De lo contrario, tardarán poco tiempo en terminar como Liceras.