La Federación de Sociedades de la Cruz Roja y la Media Luna Roja ha advertido de que el tsunami provocado por el terremoto de 8,9 grados que ha sacudido la costa noreste de Japón ya es "más alto que algunas de las islas" del océano Pacífico por las que va a atravesar.
"Nuestra mayor preocupación es la región de Asia y Pacífico, donde los países en vías de desarrollo son claramente los más vulnerables ante este tipo de desastres", declaró desde Ginebra el portavoz de la Federación, Paul Conneally. "El tsunami es una amenaza importante", añadió. "De momento, es más alto que algunas islas y puede ir derecho hacia ellas", agregó.
Alerta del tsunami en toda la cuenca del Pacífico
La alerta de tsunami por el fuerte terremoto que se ha producido este viernes en Japón se ha extendido a toda la cuenca del océano Pacífico excepto el territorio no insular de Estados Unidos y Canadá, según ha informado el Centro de Alerta de Tsunamis del Pacífico de Estados Unidos (PTWC, por sus siglas en inglés).
La advertencia afecta a Hawai y se extiende también a México y los países de Centroamérica y Sudamérica que tienen costa en el Pacífico.
El jueves por la noche se emitió una alerta de tsunami para Hawai a raíz del terremoto de 8,9 grados en la escala de Richter registrado junto al litoral nororiental japonés, de manera que las autoridades hawaianas ordenaron la evacuación de todas las zonas costeras.
Según las autoridades hawaianas, todo el archipiélago corre el peligro de sufrir daños por un tsunami generado por el seísmo. Éste es el mayor terremoto que se ha producido en Japón desde hace 140 años, y ha provocado olas de tsunami de hasta diez metros de alto que han arrasado con campos de cultivo, casas y vehículos y han desencadenado incendios.
Se prevé que Hawai reciba el impacto del tsunami a las 3.00, hora local. Las sirenas de defensa civil han sonado en todo el estado antes de las 22.00 horas para avisar a los habitantes.
"Cada cresta de ola puede durar entre 5 y 15 minutos, o incluso más, e inundar las zonas costeras", señala la advertencia. "El peligro puede mantenerse durante muchas horas tras la primera ola porque llegarán otras después", añade.
El comunicado, que también indica que los escombros arrastrados por el tsunami podrían amplificar su fuerza destructiva, dice que "se deberían emprender acciones urgentes para proteger las vidas y las propiedades".