No es la primera vez que pasa. Ya ocurrió con la vacuna de la varicela y ahora es la de la meningitis B la que está provocando que cientos de padres españoles viajen hasta Portugal, Andorra o Francia para adquirirla en las farmacias de estos países.
Está en venta en toda Europea menos en España. El ministerio de Sanidad, a pesar del visto bueno de la Agencia Europea del Medicamento, prohibe su venta en las farmacias de nuestro país. Sólo se dispensa en los hospitales cuando existe un brote de la enfermedad o para colectivos en situación de riesgo.
La Asociación Española de Pediatría recomienda esta vacuna. La meningitis B es una enfermedad muy grave que termina con el enfermo en el hospital y, en ocasiones, con un final trágico. Los pediatras piden su inclusión en el calendario oficial de vacunación infantil, ya que los menores de un año son los más proclives a padecerla. "Comprendemos que el Estado español no pueda financiar todo pero otra cosa es la falta de libertad", asegura el vicepresidente segundo a la AEP, Fernando Malmierca.
Y esa falta de libertad es la que está llevando a cientos de padres de Castilla y León a desplazarse hasta Portugal para comprar la vacuna. Viajan con una nevera, como las que se ven en la playa, y una receta de su pediatra privado que será el que se la ponga al niño.
La meningitis B es una enfermedad cíclica. Entre 2013 y 2014 se confirmaron tres casos en Castilla y León. Se calcula que hay 631 casos en España cada cinco años en niños menores de cinco.
El ministerio de Sanidad dice que, de momento, no va a cambiar de opinión. Cree que no hay suficientes casos como para inmunizar a la población. La Sociedad Española de Epidemiólogos apoya esta decisión. Argumenta que la efectividad de la vacuna aún no está demostrada.