Han pasado cinco años desde que el presidente del Gobierno anunciaba el Estado de Alarma, lo que suponía medidas drásticas para restringir la movilidad de las personas y la actividad económica, entre ellas el encierro en casa. Lo que inicialmente iban a ser 15 días, se convirtieron en prácticamente toda la primavera. La cuarentena se prolongó hasta el 21 de junio.
Calles y plazas vacías o parques desiertos que contrastaban con balcones llenos. También con hospitales saturados. En los primeros meses, las restricciones impuestas solo se permitían salir de casa para adquirir alimentos, productos farmacéuticos o atender necesidades básicas. No había colegios, y muchas personas teletrabajaban. Las quedadas se convirtieron en videollamadas y los aplausos a los sanitarios en una rutina diaria.
La pandemia del coronavirus marcó un antes y un después en las vidas de millones de personas, redefiniendo nuestra forma de trabajar, relacionarnos e incluso de entender la incertidumbre. Cinco años después, ese recuerdo aún permanece muy vivo en nuestras memorias.
Puedes estar informado de las principales noticias de Castilla y León en nuestros perfiles de Facebook y X