El director del Musac, Agustín Pérez Rubio, presentó hoy en la Feria del Libro de Guadalajara (México) el número cero de la revista bianual ‘Radar’, una publicación que refrenda su apuesta personal por convertir al museo en "una plataforma de pensamiento". "Tradicionalmente se ve a los museos como contenedores, que proponen argumentos o historias a través de las exposiciones, pero para nosotros era fundamental tender puentes de diálogo. Desde que asumí el cargo hace un año quería que el Musac reflejara una reflexión en torno al pensamiento y el arte contemporáneo", apuntó.

Críticos de arte, arquitectos, directores de museos y artistas, pero también filósofos, antropólogos o economistas tendrán espacio en esta publicación que incluirá en cada número una separata especial, donde varios artistas desarrollen un proyecto específico para la revista. Según apuntó Pérez Rubio, se editarán 2.000 ejemplares de cada número (mil en inglés y otros tantos en castellano), y cuando se agote cada tirada se pondrán todos los textos a disposición del público en la página web del Musac. "No queremos que sea una publicación elitista, sino que el público pueda tener acceso a sus contenidos de una forma directa".

‘Radar’ ha visto la luz en Guadalajara con un padrino de excepción, el escritor mexicano Jorge Volpi, que en la presentación de la revista realizó un recorrido histórico apasionante sobre el significado y la evolución del concepto ‘América Latina’ en los dos últimos siglos, ya que la revista se dedicará a plantear cuestiones monográficas, que en este número cero se centran en ‘Aspectos de la Cultura contemporánea de América Latina’, acompañando la exposición ‘Modelos para armar’, que estos días también puede visitarse en Guadalajara con obras de más de 40 artistas latinoamericanos procedentes de los fondos del Musac.

"América Latina es una identidad que en nuestra época no es fácilmente definible. Somos una especie de territorio indefinido, lleno de espacios distintos, y que por tanto es posible intentar armar para comprender la América Latina contemporánea", apuntó tras subrayar que "en la actualidad imaginamos a América Latina con los prejuicios y clichés que la alimentaron en la mayor parte de estos dos siglos de vida independiente".

En su opinión, "la literatura ha sido el medio fundamental que América Latina ha utilizado para la construcción de su identidad nacional", si bien "también se ha construido en oposición a otras naciones, en primer lugar frente a España y luego frente a los países vecinos.

"A partir del siglo XX, América Latina cambia su composición y adquiere una relevancia internacional mayor frente a la metrópolis europea y estadounidense. Si bien concluidas las dos guerras mundiales, inevitablemente pasa a ser un territorio más de la Guerra Fría, entre el comunismo y el capitalismo, que provoca el cliché que aún hoy persiste, que la convierte en una región llena de recursos naturales, perfectamente mal gobernada y con guerrilleros heroicos a los que hay que sumar el realismo mágico de García Márquez", explicó.

Para él, ‘Cien años de soledad’ "transforma la literatura latinoamericana y cambia la mirada hacia América Latina de una forma esencialmente equivocada: la idea de que somos como todos los personajes de la novela, personajes que viven en territorios tropicales y exóticos donde siempre pasan cosas extrañas o tragedias inconmensurables. Durante las primeras décadas del siglo XX somos esencialmente productores de exotismo para el mercado global, y eso se traslada de igual forma al mundo del arte, donde los artistas tienen que mostrar su latinoamericaneidad a través del exotismo, y luego se ven obligados a romper con esa tradición.

La llegada de la globalidad ha colocado a América Latina en un territorio peligroso y equívoco. ¿Qué nos característica? Ésa es la gran pregunta que plantean estos ‘Modelos para armar’, y la respuesta es que quizá ya no hay una América Latina como tal, quizá deberíamos dejar de utilizar ese nombre, pero seguimos insistiendo en esa idea, pensando que hay una corriente subterránea que quizá es posible rescatar. ‘Radar’, gracias a las colaboraciones de los muchos autores que intervienen en este primer número, intenta recomponer una especie de guía, atisbos de maneras de pensar lo latinoamericano esencialmente desde el arte, para darle una nueva vida a ese cliché que a veces nos resulta tan incómodo, que es América Latina", argumentó antes de invitar al público asistente a disfrutar de la revista y a que visite la exposición y realicen "esta ida y vuelta por América Latina".

Propuesta de presente y de futuro

La codirectora de la revista, María Inés Rodríguez, explicó que el título ‘Modelos para armar’ se ha tomado prestado de la novela de Julio Cortázar, que creó en los 60 "una ruptura con la forma de contar el relato, que pasa de ser lineal a algo diferente". "El lector de repente cobra importancia y debe construir su propio relato y tomar la iniciativa. Esa estructura nos parecía muy importante porque permitía mostrar la colección del museo e involucrar a nuestro público. En el museo generamos contenidos y reflexión desde el arte en relación con lo real. Y esta revista nos permite invitar a personalidades de otros ámbitos profesionales para que pongan sobre la mesa su mirada a los problemas contemporáneos", argumentó.

Por su parte, el tercer codirector de la publicación, Octavio Zaya, destacó el convencimiento del Musac de que "el arte no es una entidad ni una práctica autónoma. ‘Radar’ quiere reunir una serie de discursos que componen el entramado de la vida del arte, la propia vida. Es una revista de arte pero sobre todo de pensamiento, que no va a representar los intereses de la problemática de Latinoamérica exclusivamente, sino del arte contemporáneo y de la sociedad que vivimos a diario".

Asimismo, adelantó el contenido del próximo número, que llevará por título ‘Estrategias sobre lo real, discursos en torno a la precariedad y la crisis’, y que contará con la colaboración de "profesores, artistas, intelectuales, científicos y economistas". "Lo interesante es que toda esta gente aporte una visión dentro del arte, tender puentes entre la práctica artística y el pensamiento de la sociedad", refrendó Pérez Rubio.