Los españoles duermen poco y mal. Es una de las conclusiones del último Congreso Nacional de Medicina General y de Familia. Más de cuatro millones de personas en nuestro país sufren algún tipo de trastorno del sueño, el 30% de ellos tiene insomnio. Es un problema que no solo afecta a los mayores, también al 25% de los jóvenes.

El uso abusivo de las pantallas en las últimas horas del día afecta directamente a la calidad del sueño, es lo que cree Pedro Prieto, enfermero especialista en enfermería familiar. Esto tiene un impacto directo en "la población infantil, adolescente y joven, por el uso que realizan, lo que dificulta que al día siguiente no tengan la energía suficiente como para tener un adecuado rendimiento", dice Prieto. 

Efecto engaño

Las pantallas son altamente perjudiciales por el tipo de luz que emiten. Tanto los teléfonos móviles como los ordenadores o las consolas generan un "efecto engaño en el cerebro". Lo que ocurre, según explica Pedro Prieto, es que el cuerpo, ante ese tipo de radiación, "piensa que todavía es de día, lo que altera la segregación de melatonina". 

Muchas de las personas que tienen problemas para dormir recurren a medicamentos o productos de farmacia, pero hay una serie de hábitos que pueden ayudar a conciliar el sueño de forma natural. "La siesta, en caso de que la durmamos, como máximo debe durar 20 minutos y, cuando nos vayamos a la cama, si llevamos más de 20 minutos sin poder dormir, hay que levantarse y hacer una actividad relajante como leer hasta que nos vuelva a entrar sueño", recomiendo Pedro. 

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