El arzobispo de Valladolid, Ricardo Blázquez, ha asegurado durante la homilía de la misa en honor del patrón de la ciudad, San Pedro Regalado, que "la debilidad de la Iglesia proviene de los pecados de sus hijos y no de los obstáculos de los poderes exteriores" y resaltó que el Papa Benedicto XVI ha denunciado "valientemente los pecados" a través del "reconocimiento humilde de loas fallos y su condena inequívoca".
Blázquez se refirió así a las dificultades por las que atraviesa la Iglesia en los últimos meses y manifestó la necesidad de "resarcir en la justicia a los que hayan sido víctimas de los fallos" de la Institución eclesiástica e insistió en que la celebración de San Pedro Regalado invita a "conectar con el impulso vigoroso del Papa de lograr una purificación personal y de la Iglesia" en la que "los niños sean más respetados, los pobres reciban una solidaridad más eficaz y los desalentados encuentren la luz de la esperanza".
El arzobispo centraba así su primera celebración solemne desde su llegada a Valladolid, por lo que mostró su satisfacción y su agradecimiento a "la acogida cordial" de una ciudad y una diócesis que "se han acogido a la protección de San Pedro Regalado", ya que "la proximidad en el espacio hace más elocuente su mensaje".
En este sentido, el prelado recordó la vida del santo, nacido en la ciudad en 1390 y del que destacó que fue "reformador y franciscano, un santo que introdujo una reforma en aquella situación decadente" que logró percibir el "contraste entre la deformación de aquel momento y la forma original evangélica" gracias a lo que "inició el paso de la relajación".
"Su lección tiene aplicaciones porque hoy necesitamos un ejercicio de purificación. La mediocridad no sacia las inquietudes más nobles del hombre", aseguró.
Entre los asistentes se encontraban el alcalde de Valladolid, Francisco Javier León de la Riva; la concejal de Cultura y Turismo, Mercedes Cantalapiedra; la concejal de Educación, María Ángeles Porres; el presidente del grupo municipal socialista, Óscar Puente.
Estuvieron presentes algunos miembros de la Diputación de Valladolid como su presidente, Ramiro Ruiz Medrano; el vicepresidente segundo, Alejandro García, y el portavoz del Grupo Popular, Jesús García Galván. También asistieron el delegado provincial de la Junta de Castilla y León en Valladolid, Mariano Gredilla y el subdelegado del Gobierno en la ciudad, Cecilio Vadillo, entre otros.