ECONOMÍA | Pierde un 2,18% al cierre de la sesión

El Ibex 35 registra el nivel más bajo desde junio de 2010

  • La sesión terminó con sólo un valor en positivo, Gas Natural (+0,22%)
  • El mayor descenso correspondió a Sacyr Vallehermoso (-6,36%)

Europa Press / Madrid

El parqué madrileño ha cerrado la sesión con una caída del 2,18%, que ha situado al Ibex 35 en la cota de los 9,114,9 puntos, el nivel más bajo desde el junio de 2010, arrastrado de nuevo por el temor a un empeoramiento de la economía global.

La sesión terminó con sólo un valor en positivo, Gas Natural (+0,22%). El mayor descenso correspondió a Sacyr Vallehermoso (-6,36%), seguida de Gamesa (-6,26%) y Técnicas Reunidas (-5,51%).

En el sector financiero, Bankinter cedió un 3,45%, por delante de Banco Sabadell (-3,13%), Banco Popular (-2,92%), Banco Santander (-2,82%) y BBVA (-2,81%). Repsol YPF, por su parte, cayó un 2,3% y Telefónica, un 2,8%.

La jornada ha sido tensa en todos los mercados, principalmente en el de deuda, donde la prima de riesgo ha superado los 400 puntos básicos. Los inversores han comenzado a temer por un rescate de España y la Comisión Europea se ha visto obligada a transmitir un mensaje de tranquilidad para evitar la sangría de los mercados.

Bruselas ha mostrado este martes su plena confianza en las medidas de ajuste que está impulsando el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y ha rechazado que la posibilidad de un rescate para España esté "sobre la mesa".

Tras el mensaje de la Comisión Europea la prima de riesgo se ha relajado hasta el nivel de los 380 puntos básicos y la Bolsa española ha contenido su descenso, pero los malos datos procedentes de Estados Unidos han reavivado el temor sobre una nueva recesión.

El gasto de los consumidores de Estados Unidos descendió en junio en 15.440 millones de euros, un 0,2% menos en comparación con el mes de mayo, lo que representa el primer descenso del gasto desde septiembre de 2009. Esta caída, unida a la registrada por el sector manufacturero conocida al lunes, ha vuelto a sembrar la desconfianza entre los inversores, en un mes tradicionalmente muy volátil.

Los expertos explican que agosto, un mes en el que gran parte de los inversores están de vacaciones, los movimientos se magnifican y la volatilidad se eleva.