Valdelagua del Cerro es una pequeña localidad soriana, a unos 55 km. de la capital, situada en la comarca del Moncayo. Es una población de origen incierto, ligado al desarrollo de la ganadería lanar en la Castilla de la Baja Edad Media y posible punto militar.
Valdelagua del Cerro presume de una posición estratégica en lo alto de un precioso cerro. Esta posición la hace sumamente bella y privilegiada, ya que desde el pueblo la vista es inigualable y digna de cualquier visitante en busca de belleza.
Como el resto de la España despoblada, carece de servicios, pero los vecinos estables como los ocasionales se esfuerzan en mantener las mejores condiciones de habitabilidad y convivencia, fomentando un turismo que valora y disfruta con la naturaleza, la tranquilidad, la belleza de lo sencillo y, al tiempo, inmenso.
Actualmente, cuenta con 12 habitantes, aunque los fines de semana suelen ser más y en época estival puede incluso llegar a más de 300.
Uno de los aspectos más característicos del pueblo es la construcción de sus casas, cuyas paredes están construidas con las piedras de los alrededores.
El clima está condicionado por su altitud: 1.095 m. sobre el nivel del mar.
Respecto a la flora predominan los bosques de carrasca y algunos robledales centenarios.
En cuanto a la fauna mayor, abundan los corzos y también se observan frecuentemente ciervos y jabalíes. La fauna menor es más variada, se pueden apreciar comadrejas, topos, lagartos, zorros, tejones… Las aves son muy diversas, jilguerillos, abejarucos, culiblancos, mirlos, codornices, así como multitud de rapaces.
La ganadería ovina está ligada al origen de la población, cuyas numerosas corralizas, hoy ruinosas, dejan constancia de la riqueza ganadera del lugar, complementada con la explotación agrícola cerealista y algunas legumbres.
Al igual en otros muchos lugares de Castilla, su población, en gran medida, emigró a mediados del siglo XX, si bien, en los últimos años, se ha convertido en un lugar de descanso y vacaciones, especialmente en verano.
Sus fiestas patronales se celebran en honor de Santa María Magdalena, durante la tercera semana de agosto. A destacar también que, durante el resto del año, se realizan un considerable número de actividades que hacen que el pueblo esté animado. Merece especial atención en este apartado el Cross de Valdelagua del Cerro.
El paisaje es inigualable pero, además de eso, recorriendo el pueblo, el visitante se encuentra con la iglesia parroquial de Santa María Magdalena, construida al abrigo de un importante desarrollo económico y social de la vieja Castilla en los comienzos del Renacimiento. En su interior destaca el retablo mayor, presidido por una talla de la Magdalena, de estilo romanista.
En la parte baja del pueblo se encuentra La Ermita de Los Santos, datada en el siglo XVIII, también conocida como la ermita de San Roque y San Sebastián. De aspecto sencillo, pero con un interesante retablo en el que sobresalen las imágenes de San Roque y San Sebastián. En estos momentos, la ermita está de actualidad, ya que en ella se ubicará una fábrica de cerveza artesanal, elaborada 100% con producto del municipio.
En cuanto a infraestructuras pensadas para los visitantes, existe un aparcamiento de autocaravanas, con todo lo necesario. El pueblo también cuenta con distintos paseos indicados como al Alto de la Bandera, al Río Alhama o a la Fuente de la Casa, rutas habituales entre los lugareños.