Verónica Alonso, burgalesa, retomó sus estudios con más de 40 años. Decidió empezar a estudiar auxiliar de enfermería en el colegio Círculo Católico en Burgos. Su vida dio un giro y fue ahí cuando, de nuevo, su sueño cobró fuerza: "Yo he estado toda la vida trabajando de administrativa. Por cosas de la crisis la empresa cerró, me vi en la calle y no sabía qué hacer con mi vida. Y siempre había tenido vocación de sanitaria", nos cuenta. Ahora, a sus 46 años, es auxiliar de enfermería. El camino no ha sido fácil y menos siendo madre de dos niños: "Para mi lo primero son mis hijos, mis hijos también tenían sus estudios. Hacías las comidas para el día siguiente. Algunos días te quedabas hasta muy tarde estudiando y luego te levantabas pronto", declara Alonso.

Por eso, el apoyo incondicional de su entorno, en especial el de su marido y sus hijos, ha sido esencial. "Mi marido me dijo que ahora tenía unos años de paro y que aprovechará si era lo que me gustaba. Mi padre también me ayudó muchísimo, se llevaba a los niños para que yo tuviese más horas de estudio", afirma la burgalesa.

No sé imaginaba a dónde la podía llevar toda esa perseverancia: "Pensé que no pasaba del 5", cuenta Verónica. Además, se ha convertido en una de las personas con el mejor expediente académico de Formación Profesional en Castilla y León.

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