La manifestación celebrada en la tarde noche del domingo en el barrio burgalés de Gamonal ha concluido, con calma aparente y sin carga policial, al contrario que en las dos anteriores jornadas, pero con contenedores, una sucursal bancaria y bancos destrozados.
Cerca de 3.500 personas han secundado la marcha, convocada esta tarde en la confluencia de las calles Vitoria y San Bruno, y han recorrido el camino que separa este punto de la ciudad de la sede del grupo Promecal, protegida por un importante dispositivo policial, al grito de 'El pueblo unido jamás será vencido' o 'La calle es de Burgos y no Burgos de Lacalle', en referencia al alcalde de la ciudad, el 'popular' Javier Lacalle.
Desde allí han vuelto hasta la zona donde se ha desarrollado el conflicto en las dos últimas noches, punto de partida de la marcha, momento en el que han comenzado a tirar las vallas que protegen las obras, han incendiado al menos cuatro contenedores que han ubicado en medio de la calle Vitoria y han causado importantes daños en una oficina del Banco Santander.
Alrededor de las 23.00 horas era ya una treintena de personas la que quedaba en la zona de los disturbios, donde se han registrado al menos ocho bancos destrozados y arrojados contra las obras, que han perdido tras esta manifestación todo el vallado de protección que las custodiaba.
Las pintadas se han repetido de nuevo, especialmente en escaparates de entidades bancarias y aseguradoras pero también de comercios del barrio de Gamonal, que en esta ocasión no ha sido escenario de carga policial, como sí ocurrió en las dos últimas jornadas.
El concejal socialista Antonio Fernández Santos ha exigido, a través de su perfil en la red social Twitter, la dimisión del alcalde de la ciudad, Javier Lacalle, a quien ha considerado un "estorbo" y que ha comparecido por primera vez ante los medios esta misma tarde, a la misma hora a la que se había convocado la nueva marcha.
Asimismo, se mantiene la convocatoria para las 6.00 horas de la madrugada de este lunes, llamamiento que se está alentando a través de Twitter y que persigue, como se ha acordado en la asamblea celebrada esta mañana, impedir el acceso de máquinas y operarios a la obra del bulevar, proyecto contra el que han llevado distintos actos de protesta antes de los acontecimientos acaecidos en los últimos días.