Este miércoles se registra el pico de la tercera ola de calor. Valladolid se lleva la palma en el podium de temperaturas, con 41 grados, seguido de Palencia, Burgos y Zamora, que alcanzarán los 40 grados.
Trabajar con esas temperaturas no es nada fácil. La normativa obliga a tomar medidas ante situaciones extremas, aunque en nuestro paseo por la calle, hemos comprobado que no siempre se cumple.
Hay obras en las que los trabajadores tienen el mismo horario en verano y en invierno. En esos casos, nos cuentan que la empresa les suministra agua, sombrillas, hasta crema del sol y que les manda a hacer trabajos en la sombra. Otros, como el servicio de limipieza de Valladolid o Correos, sí que flexibilizan sus horarios.
Y si en la calle hace calor, en asadores de pollos llegan a alcanzar los 45 grados. Así nos lo cuentan en Todo Pollo, en Valladolid. Reconocen que no es cómodo, pero que son tres meses al año. En su caso, pueden atender directamente a la calle, que es la opción por la que optan muchos. Un ventilador les sirve de alivio, aunque realmente ese momento llega cuando acaban las máquinas y encienden el aire acondicionado.
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