El proceso judicial se prolongará durante un mes y ha despertado una gran expectación. En el banquillo se sentarán Montserrat González, Triana Martínez y Raquel Gago, las tres acusadas de acabar con la vida de la presidenta de la Diputación, Isabel Carrasco .
En el mismo edificio se ha preparado un espacio para la prensa donde los más de 100 periodistas de una treintena de medios que se han acreditado podrán seguir la instrucción
En el juicio con jurado popular participan cuatro acusaciones y tres defensas. En las últimas horas Castilla y León Televisión ha tenido acceso al escrito de calificaciones previas de la fiscalía. Un cuidado relato de los hechos según el cual, el fiscal, entiende que las tres acusadas planificaron pormenorizadamente un asesinato que a punto estuvo de ser el crimen prefecto.
La teoría del fiscal jefe de León y que ha esquematizado en su escrito de calificaciones deja muy clara su tesis. Montserrat González, su hija Triana Martínez y la amiga de esta, la policía local Raquel Gago, planificaron al detalle el crimen de Isabel Carrasco que materializaron en la tarde del 12 de Mayo de 2014 y sus planes a punto estuvieron de salirles bien.
La madre ejecutó a su víctima por la espalda, con tres disparos y con la frialdad propia de un sicario. Después abandonó tranquila del lugar de los hechos. Su hija y Raquel le ayudaron a ocultar el arma y a huir. Todo iba según lo previsto pero apareció un hombre, el policía jubilado que presenció el asesinato y que siguió a Montserrat facilitando su detención. De no ser por él es muy probable que el caso hubiese quedado sin resolver porque nadie habría pensado que la mujer del comisario de Astorga hubiese cometido este crimen.
Jurídicamente, el caso se califica de asesinato porque no hubo opción de defensa para la víctima y de atentado porque el crimen se cometió contra la presidenta de la Diputación y no contra la persona. Se aplica la agravante de disfraz a las tres acusadas porque así lo estipula la ley y el fiscal propone 54 de los 99 testigos que declararán en el juicio. El resto, hasta 114, son peritos.