Todos los grupos políticos dispuestos a trabajar en una misma dirección. Apoyo unánime a las victimas del terrorismo. El mensaje de unidad ha sido claro y directo. José Antonio Alonso ha señalado que la ley recoge todo un sistema de protección integral para las víctimas del terrorismo, que en su opinión son "el auténtico recurso moral de los demócratas frente al terrorismo".
Soraya Sáenz de Santamaría ha declarado "que no esperen nada los terroristas porque todas las puertas están cerradas frente a los violentas, a los que no les queda más alternativa que dejar las armas".
La ley contempla su aplicación retroactiva a todos los actos terroristas acaecidos a partir del 1 de enero de 1960, de forma que se compensará a quienes en aplicación de una legislación anterior hayan podido recibir ayudas o indemnizaciones inferiores a las que establece la nueva ley.
Entre las novedades de esta ley está también el reconocimiento de la figura de los amenazados y la creación de un baremo de indemnizaciones idéntico para todas las víctimas. Además otorga apoyo integral a los damnificados con atención psicológica, ayudas en la educación, empleo y vivienda.
En defensa de la dignidad de las víctimas del terrorismo, el texto prohíbe de forma expresa la existencia en lugares públicos de monumentos, escudos, insignias o placas de enaltecimiento individual o colectivo del terrorismo o de los terroristas.