Rosas, tulipanes, narcisos, francesillas… ya sean de temporada o exóticas casi todas las flores que encontramos en las floristerías han pasado antes por Holanda.
A tan sólo 20 kilómetros de Amsterdam, en Aalsmeer, se encuentra la sala de subastas de plantas más grande del mundo.
Todos los días los exportadores y mayoristas acuden para pujar, pero la semana de San Valentín es especial. Según el encargado de prensa de Flora Holland, Lex Van Horssen, esta semana han vendido entre un 50% y un 60% más que una semana habitual.
La estrella es la rosa roja. En estos días han facturado más de cien millones de euros.