La alerta ha saltado en Europa por una
posible amenaza terrorista de Al Qaeda. Estados Unidos, Reino Unido y Japón han sido los primeros en avisar a sus ciudadanos de las precauciones que deben tomar si viajan al viejo continente. Una advertencia que puede tener consecuencias en el turismo.
El riesgo de atentado terrorista parece ser mayor en países como Francia y Alemania.
De visita por Madrid nos encontramos a una turista que viene desde Arizona. “Mi sensación es que tenemos que estar alerta en cualquier lugar. Llevamos aquí tres semanas y no hemos tenido ningún problema. No nos sentimos inseguros. Así que sólo disfrutaremos”, asegura.
Entre las recomendaciones que los gobiernos han lanzado a sus nacionales está estar especialmente atentos en lugares de gran afluencia de gente, zonas turísticas y transportes públicos. Pero estos mensajes no parecen calar demasiado, a juzgar por otra ciudadana norteamericana. “Yo personalmente no estoy demasiado preocupada cuando viajo con algún tipo de alerta. Me parece bien que la gente lo esté, pero pienso que realmente no hay razón para estarlo”
No piensan así los servicios secretos de Estados Unidos y Reino Unido que dicen tener información procedente de grupos extremistas islámicos en Pakistán.
Lo que también parece claro es que mensajes de este tipo pueden hacer que el turismo se resienta. El problema es que cualquier prevención es poca cuando se trata de terrorismo.