El comité rebelde que controla la ciudad libia de Misrata, en el oeste del país, ha retirado este lunes su rechazo a una intervención terrestre extranjera y ha pedido a la OTAN y a la ONU que envíen tropas porque "es una situación de vida o muerte".
El portavoz de la cúpula rebelde en Misrata, Nuri Abdulá Abdulati, se ha desmarcado este lunes de la postura oficial del bando sublevado y ha sido el primero en pedir tropas extranjeras sobre el terreno. Desde que arrancasen los combates entre los sublevados y el régimen de Muamar Gadafi, la oposición había rechazado cualquier injerencia en este sentido.
"Necesitamos ya una fuerza de la OTAN o de Naciones Unidas sobre el terreno", ha declarado Abdulati, en declaraciones recogidas por el periódico estadounidense 'The Washington Post'.
El comité de 17 miembros que controla Misrata, el principal enclave rebelde en la zona occidental de Libia, ha enviado una petición formal al Consejo Nacional de Transición, ubicado en Benghazi, para que modifique su postura. Dicho organismo es el único lazo entre los rebeldes de Misrata y la Alianza Atlántica y hasta ahora se ha mostrado contrario al envío de militares a suelo libio.
"No aceptábamos ningún soldado extranjero en nuestro territorio, pero eso era antes de enfrentarnos a los crímenes de Gadafi", ha explicado Abdulati. No en vano, el régimen libio ha emprendido un asedio constante sobre Misrata, considerado un enclave estratégico y escenario prácticamente diario de ataques y combates.
El portavoz rebelde ha apelado a "los principios humanitarios e islámicos" para que "alguien llegue y frene los asesinatos". En este sentido, ha subrayado que "todo el mundo árabe está pidiendo la intervención de Occidente por primera vez en la historia".
Abdulati ha asegurado que en Misrata se vive "una situación de vida o muerte", en la que se hace necesario que tropas foráneas --ha citado en concreto a Francia y Reino Unido-- protejan a la población civil y combatan contra los efectivos de Gadafi. "Si no vienen, moriremos", ha advertido.
No obstante, Abdulati ha asegurado que la población de Misrata está preparada para luchar por su libertad, e incluso ha apuntado a que, "aunque muriesen 400.000 personas y sólo 100.000 sobrevivan", ya sería una "victoria".