Desde los años 80, 210 personas han muerto en accidentes de tren en España, de ellas 35 fallecieron en siniestros ferroviarios ocurridos en Castilla y León.
El accidente ocurrido este miércoles en Casteldefells ha sido el más grave ocurrido en España desde 2003, cuando 19 personas perdieron la vida en Chinchilla, en la provincia de Albacete, al chocar un Talgo y un mercancías.
En Castilla y León el último accidente ferroviario mortal tuvo lugar en marzo de este año. Un hombre falleció al chocar la locomotora que conducía con la parte trasera de otro tren de mercancías en las inmediaciones de la estación de Arévalo, Ávila.
Uno de los más graves ocurridos en la Comunidad se produjo el 21 de agosto de 2006. Siete personas murieron y 36 resultaron heridas al descarrilar un Intercity que cubría la línea La Coruña – Hendaya, en la localidad de Villada, en Palencia.
1944, León
Pero sin duda si hay un día negro en la historia ferroviaria de España ese es el 3 de enero de 1944. A la salida de la estación leonesa de Torre del Bierzo, el tren que cubría la línea de Madrid a Galicia, chocó contra una locomotora en maniobras. La censura del régimen franquista silenció el grave accidente que causó centenares de muertos, aunque la cifra oficial facilitada poco después por Renfe fue de 78 fallecidos, habría habido hasta 500 desaparecidos.
A este siniestro le siguió en 1972 otro de gran importancia, en el que murieron 77 personas tras descarrilar el ferrobús Cádiz-Sevilla.