El Grupo Renault ha invertido 60 millones de euros en la puesta en marcha de 27 nuevos sistemas de pruebas para mejorar las prestaciones y lograr rebajar las emisiones contaminantes de su gama de motores, una infraestructura en la que se está desarrollando el K9, que ya se fabrica en Valladolid, y la nueva ingeniería que saldrá de la planta vallisoletana a partir de 2012, bajo los requisitos de la norma europea Euro 6.
La inversión ha permitido la puesta en marcha del denominado Polo de Innovación Mecánica (PIM) dentro del Centro Técnico de Lardy (Essonne, Francia), que es la infraestructura de referencia de pruebas mecánicas del Grupo a nivel mundial y fue creado en 1951.
Un grupo de periodistas castellanos y leoneses conoció de primera mano estas instalaciones, donde se gestan los órganos mecánicos (motores y cajas de cambio) de todos los vehículos de la compañía automovilística.
El responsable del Departamento de Ingeniería de Sistemas de Pruebas, Pilippe Anrigo, explicó que en las instalaciones nacen estos componentes en las condiciones óptimas marcadas y después se derivan a las ingenierías locales, para que los ajusten y los monten.
Anrigo explicó detalladamente los nuevos sistemas de pruebas instalados por la marca del rombo en un nuevo edificio de 5.000 metros cuadrados (PIM), donde trabajan 70 personas, y donde se podrá probar toda la gama de motores térmicos de Renault.
Un ala del nuevo edificio está dedicada a la reducción del consumo para limitar las emisiones de CO2 y ayudar a Renault a responder a las exigencias de las normas medioambientales Euro 5 y 6. Los diez bancos de pruebas que la componen están dedicados a los estudios de rozamientos, a la térmica de los motores y a la depuración en frío. "Su cometido es importante para el desarrollo de los grupos motopropulsores en el contexto actual donde respetar el medio ambiente constituye uno de los mayores desafíos de la industria del automóvil".
En los bancos denominados térmicos y rozamientos, los ingenieros trabajan para reducir el consumo, a través de la disminución de cilindrada de los motores.
Anrigo explicó que una de las principales novedades tecnológicas reside en los bancos aerodinámicos, que permiten probar los motores en su entorno aerodinámico, es decir, con el conjunto de los intercambios que se dan en el vehículo en frío como en caliente. "Estos bancos representan una primicia mundial", enfatizó.
Por lo que se refiere a las otras alas del edificio, abrigan una veintena de bancos de pruebas y de medidas de nueva generación para la puesta a punto mecánica (fiabilidad y durabilidad) y energética (búsqueda del mejor compromiso entre prestaciones, consumo y contaminación).
Estos bancos permiten simular cada vez con mayor precisión el comportamiento del motor sobre el vehículo y emplear las herramientas "más evolucionadas" de puesta a punto asistidas por ordenador, lo que permite reducir los plazos de desarrollo.
"Estos nuevos sistemas, entre los más modernos del mundo, mejorarán el rendimiento de la ingeniería al aportar una mayor flexibilidad en la realización de las pruebas por su propio carácter evolutivo", sentenció el responsable de PIM.
Más de 200 bancos en 137 hectáreas
La nueva infraestructura permite al Centro Técnico de Lardy de Renault contar con más de 200 bancos de pruebas dedicados a la mecánica y con cerca de 2.000 trabajadores, que trabajan en unas instalaciones que ocupan una superficie de 137 hectáreas.
Se trata de bancos para motores, cajas de cambio, rodillos de puesta a punto y para caracterizar y validar funciones y componentes. Todos estos bancos se emplean como apoyo al diseño y validación de los órganos mecánicos.
Aparte de estas pruebas mecánicas, que constituyen la mayor parte de la actividad del centro, se realizan otras para conocer las anomalías dela base rodante y validar la resistencia de los equipamientos de carrocería frente al tiempo y al clima.
Los periodistas de la Comunidad pudieron asistir también a una prueba de choque, que también se realizan en el centro, para "salvar mejor vidas" y como parte sustancial de la "política de seguridad" de la marca.