Los secretarios regionales de CCOO y UGT en Castilla y León, Ángel Hernández y Agustín Prieto, respectivamente, aseguraron hoy que el éxito de la huelga general del próximo miércoles está garantizado en los grandes centros industriales, los de mayor representación sindical, y asumieron las mayores dificultades para secundar la convocatoria en las pequeñas empresas, donde centrarán su labor "informativa" los piquetes.
Agustín Prieto aseguró que en las empresas grandes "va a haber un altísima participación" que "no va a salir en la foto", mientras que en las pequeñas "es preciso hacer una mayor esfuerzo", ya que por el bajo número de empleados y la falta de representación sindical, "es donde hay más coacciones". "La huelga está ganada en el sector productivo industrial", dijo.
Prieto remarcó que los comités de las empresas más importantes de la Comunidad, alrededor de 500, ya han expresado su adhesión a la huelga, con lo que "no van a ir a trabajar" y el "seguimiento va a ser un rotundo éxito con plenas garantías", tras la labor informativa desarrollada durante este mes por ambos sindicatos de la mano. Aseveró que el día 30 esperan un cambio en la "política errónea" del Gobierno y que se convoquen las mesas del diálogo social, pero siempre que no sea un "paripé", sino para una rectificación en toda regla.
El líder de UGT en la Comunidad insistió en que los piquetes son la única forma de garantizar que todos los trabajadores presionados por los empresarios puedan hacer la huelga e hizo un llamamiento a todos a secundar la convocatoria. Prieto también pidió a los consumidores que ese día "no consuman" y a todos los ciudadanos que secunden las manifestaciones convocadas en las capitales de provincia y las cabeceras de comarca a partir de las 18.00 horas.
Ángel Hernández incidió en que ya tienen "sensaciones muy positivas" en los sectores industrial y público y remarcó que si más de un 50 por ciento de los ciudadanos opina que hay razones suficientes para haber convocado la movilización, es un dato con "suficiente fuerza". Aseveró el dirigente sindical que la "calidad y el éxito" de la huelga, a la que están llamados unos 800.000 trabajadores de la Comunidad, se medirá por la paralización de los grandes centros productores, de las empresas con más de 150 empleados, e incidió en que deberán centrar sus esfuerzos en las pequeñas empresas.
Hernández manifestó que esta huelga se desarrolla en un "contexto difícil y adverso", con la práctica totalidad del parlamento en contra de la movilización, con una posición beligerante de la patronal regional y provincial, y un exceso de desinformación y manipulación mediática. Sin embargo, prosiguió, "la mayoría social" entiende la movilización y si se atiende a encuestas externas que otorgan una participación de entre el 27 y el 30 por ciento, "la huelga está ganada", porque la última contra Aznar se cifró en el 17 por ciento, y en las tres anteriores, entre el 27 y el 34 por ciento. "Estadísticamente tenemos una gran parte del trabajo cubierto", dijo.
Hernández trasladó su deseo de que "los datos justifiquen el paro" y "una estrategia sostenida en el tiempo" haga cambiar al Gobierno su reforma laboral y económica y sus intenciones sobre las pensiones y la negociación colectiva, ya que la CEOE "cree que no pactando consigue más" del Ejecutivo y "está" encantada con la reforma. "No va mal la cosa, si Aznar modificó su decretazo ocho meses después de la huelga con una participación del 17 por ciento", añadió.
Derecho al trabajo
Ángel Hernández y Agustín Prieto arreciaron sus críticas contra la patronal regional, por sus constates a ataques y coacciones contra la huelga. Hernández consideró una "mandanga" para vender humo que los empresarios apelen al derecho al trabajo y les pidió que den empleo a los 200.000 parados de la región. "Si el 1 de enero tienen todos trabajo y no se hacen normas para limpiar las empresas, les prometo que no convocaremos ninguna huelga en los próximo dos años", dijo. Añadió que el tribunal constitucional considera la huelga un derecho fundamental por encima al del trabajo el día que se convoca, para garantizar que se pueda ejercer.
Agustín Prieto recordó que el derecho al trabajo constituye una "declaración de intenciones" si se tiene en cuenta que hay 4,6 millones de parados en España, que ahora utiliza la patronal contra la movilización, y se olvida de ello el resto del año. Denunció además las coacciones que se están registrando en las empresas por parte de los empresarios contra el derecho de la huelga que prevalece, con amenazas de despidos o pidiendo que se informe si se va a ir a la huelga con días de antelación.
Servicios mínimos
Ambos líderes sindicales arremetieron contra los servicios mínimos impuestos por la Junta de Castilla y León, que tacharon de "máximos". Al respecto, advirtieron de que allí donde han pactado servicios mínimos, está garantizado su cumplimiento, mientras que donde son abusivos, como en el caso de la Administración regional, "harán todo lo posible para que sean mínimos", dijo Hernández.
Prieto recordó que la Junta repite huelga tras huelga unos servicios abusivos, pese a las sentencias en contra de los tribunales, y expresó su "tremendo descontento" con el Gobierno regional, ya que en una huelga que "ni le va ni le viene, toma partido y se alinea con las tesis de la derecha y de los empresarios y coarta un derechos esencial, con unos servicios abusivos y sin pactar".