'Lo que necesitamos es que lleguen profesionales a Haití y no tantos militares. No tenemos problemas militares, nuestro problema es la pobreza'. Son palabras de Mario Land, un médico haitiano que trabaja en el Hospital Clínico de Valladolid.
Ha vivido el terremoto desde la distancia, con mucha preocupación por su familia que vive en Haití. Han sobrevivido al seismo, pero asegura que tardó tres días en poder contactar con ellos para poder conocer su situación. De momento seguirá en España, pero afirma que le gustaría volver a su país para ayudar en un momento tan complicado.
Mario Land agradece la ayuda que está enviando la comunidad internacional a sus compatriotas, pero dice que hay que pensar en futuro, después de la ayuda de emergencia que ya ha llegado. No cree que haya que aumentar las adopciones internacionales de los muchos huérfanos que deja el terremoto sino que hay que esforzarse por dar comida, techo y educación a esos niños.