Donde van, triunfan. Los churros son nuestro sabor más festivo y también más internacional. Gracias a las churreras José Luis Blanco llegan a todo el mundo.
"Más del 60 por ciento de las ventas son internacionales. Dependemos muchísimo del comercio exterior", asegura Belén Blanco, gerente de Industrias José Luis Blanco.
Más de 100 países ya son 'churrolovers' gracias a ellos. Cuando viajemos al exterior y veamos churros, es muy probable que tengan sabor vallisoletano. Calidad y más de 50 años de experiencia son los ingredientes de su mejor receta. Por eso hasta el Chef José Andrés apostó por ellos para los churros de su little Spain de Nueva York
Desde que el padre de Belén fundó la empresa hace más de 50 años, la plantilla se ha triplicado. Cada año forman a los clientes en sus instalaciones. Enseñan a utilizar las máquinas y a crear este producto, que se come tanto dulce como salado.