El presidente del Gobierno de Navarra y de Caja Navarra, Miguel Sanz, destacó hoy que las Cajas que pasen a formar parte del grupo Banca Cívica "no desaparecen", sino que mantienen su "autonomía y su funcionalidad en cada uno de sus territorios adscritos",por lo que destacó que este proceso de integración"no tiene las desventajas que puede tener una fusión real, total y absoluta, con la pérdida de autonomía y de propiedad que ello implica".
Así, Miguel Sanz afirmó, en una
comparecencia parlamentaria a petición de Nafarroa Bai para informar del proceso de constitución de Banca Cívica, que
"Caja Navarra seguirá siendo Caja Navarra y además tendrá un 41 por ciento del grupo Banca Cívica"."Caja Canarias seguirá siendo Caja Canarias y tendrá el 29 por ciento de Banca Cívica. Y Caja Burgos será Caja Burgos y tendrá el 30 por ciento de Banca Cívica. Ese es el planteamiento de este proceso, que tiene
todas la ventajas de una fusión y ninguno de los inconvenientes", aseguró.
Miguel Sanz explicó que el territorio adscrito a Caja Navarra se amplía a Aragón y a La Rioja, mientras que a Caja Burgos se le adscribe Cantabria, y CajaCanarias operará en Canarias. "Todo lo demás es territorio Banca Cívica", dijo, para insistir en que "las Cajas mantienen su autonomía y su funcionalidad, no desaparecen". Igualmente,
negó que éste sea un proceso de privatización de Caja Navarra.
Además, el jefe del Ejecutivo foral sostuvo que no ha habido "oscuridad" en esta integración y añadió que éste es
"el proceso entre fusiones de Cajas sobre el que más información se ha dado en los medios económicos y no económicos"."He recibido muchísima menos información de otros procesos de fusión que están en marcha", agregó.
Por otra parte, Miguel Sanz afirmó que
no puede "asumir el compromiso" de que Banca Cívica se convertirá en Caja en el momento en que la modificación de la ley de Cajas lo permita y señaló que esa decisión debe estar en manos de quienes "formen parte de los órganos de administración cuando se produzca el cambio normativo". "Si yo asumiera eso ahora sería poco elegante y poco democrático, aunque me pueda gustar, porque yo he sido siempre un defensor del concepto de Caja de Ahorros y lo he defendido de los críticos", afirmó.
Sobre la
futura dirección del grupo Banca Cívica, Miguel Sanz indicó que "parece razonable" que quienes actualmente son presidentes y directores generales de las Cajas que participan de este proceso formen parte de su Consejo de Administración.
No obstante, precisó que él no formará parte de este Consejo, puesto que
dejará de ser presidente de Caja Navarra una vez sean aprobados los nuevos estatutos de la entidad financiera. "Si cuando se constituya el Consejo de Administración todavía no se han aprobado los estatutos,
yo renunciaré si hay posibilidad de renuncia a estar en Banca Cívica", añadió.
Sobre
cuál ha sido su grado de implicación en este proceso de integración, Miguel Sanz explicó que básicamente ha sido "un presidente no ejecutivo que se ha dirigido bajo los parámetros, asesoramiento y planteamientos llevados a cabo por los profesionales de la entidad".
En el turno de intervención de los grupos, el portavoz de Nafarroa Bai Patxi Zabaleta afirmó que, con este proceso de integración, "se mantienen los consejos, se mantienen las marcas, pero se fusionan los recursos propios y la gestión del riesgo" y concluyó que "estamos ante una privatización encubierta, parcial en principio, no clara, pero privatización". "Ese viaje es absolutamente imprudente, porque las directivas del Banco de España son muy claras, hay que fusionarse para asumir los riesgos, pero eso hay que decirlo", dijo.
Así, Zabaleta se preguntó "cuáles son los riesgos que se están asumiendo, sin explicaciones, sin hacer públicos los datos"."¿Se fusionan los recursos propios?, ¿sí o no?, ¿se asumen los riesgos?, ¿sí o no?", preguntó.
Por parte de UPN, Carlos García Adanero respondió a Zabaleta que el Banco de España "es el que está impulsando este tipo de acuerdos" y señaló que, en cualquier caso, el grupo regionalista seguirá defendiendo el carácter aforado de Caja Navarra.
Además, García Adanero criticó que para Nafarroa Bai este proceso de integración "sería maravilloso si se hiciera con las Cajas vascas, y les daría igual que supusiera echar a la calle a trabajadores". "Ustedes quieren el acuerdo con las cajas vascas. Pero el acuerdo de Banca Cívica supone que no vamos a competir aquí con CajaCanarias o con Caja Burgos y no habrá que cerrar oficinas", afirmó.
Por su parte, el parlamentario del PSN Samuel Caro expresó su apoyo al proceso de integración iniciado por Caja Navarra y señaló que "en el marco actual hay una necesidad de las distintas entidades financieras para posicionarse, y si no te posicionas, te posicionan". "Este proceso tiene una virtud, y es que se está liderando desde Navarra", valoró, para añadir que confía en que "se solucionen los inconvenientes jurídicos y técnicos" que hagan posible que la integración entre Cajas pueda dar como resultado una Caja y no necesariamente un banco.
Desde el CDN, Juan Cruz Alli valoró que el proceso de Banca Cívica persigue "buscar un espacio en el que se coordinen esfuerzos entre entidades que además no compiten territorialmente, lo que supone garantizar el espacio histórico de desarrollo de todas ellas y evita el despido de trabajadores".
Finalmente, el portavoz de IUN, Ion Erro, afirmó que este proceso de integración "puede aportar elementos interesantes para la actividad financiera de Caja Navarra", pero apostó por que este proceso de integración dé como fruto una caja y no un banco, cuando así lo permita la ley en el caso de que sea modificada.