La integración de las tres cajas en Banca Cívica pasa este martes 9 por el voto de 51 personas. Son los miembros de sus Consejos de administración, 17 por cada entidad, y de los que cerca del 60% pertenecen a los dos grandes partidos.
Caja de Ávila es de las tres entidades la que mayor peso político tiene en su consejo. Nueve de los asientos pertenecen al Partido Popular, entre ellos el del Presidente, Agustín González. El PSOE, por su parte, cuenta con 2 consejeros. El resto lo forman representantes de los trabajadores, impositores y miembros de distintas organizaciones sociales.
En el caso de Caja Segovia, la mayoría popular también es indudable: siete consejeros, sin contar a su presidente Atilano Soto que presidió la Diputación por el PP, frente a los tres del Partido Socialista. Ambas formaciones tendrían juntas la mayoría en las votaciones de un consejo que terminan de constituir otros representantes sociales y económicos.
Frente a este amplio dominio de la presencia política, menos de la mitad de los consejeros de Caja de Burgos pertenecen a alguno de los dos grandes partidos. Seis se sientan como miembros del PP y otros dos forman parte del PSOE. El mundo de la empresa, la universidad, además de la representación sindical, completan este órgano.
En total, 29 miembros populares y socialistas en los consejos de las tres entidades. En ellos sólo se sientan tres mujeres.