Japón está luchando por recuperar el control de la planta nuclear Fukushima mientras se enfrenta una enorme crisis humanitaria y económica. El primer ministro de Japón ha visitado una de las zonas pesqueras más afectadas por el terremoto y ha dicho que se van a seleccionar los puertos que deben ser preferentemente reconstruidos bajo un programa de rehabilitación.

Los japoneses eligen este domingo a 12 gobernadores, cuatro alcaldes y la composición de varias asambleas regionales. Los votantes podrían castigar duramente al partido del primer ministro nipón por su gestión del desastre del terremoto. La oposición exige su renuncia una vez que la crisis esté controlada.

En Tokio, cientos de manifestantes han salido a la calle para protestar contra la política nuclear llevada a cabo por el gobierno.

Mientras, 22.000 soldados del Ejército japonés se están incorporando a las tareas de rescate de víctimas. La Policía Nacional japonesa ha elevado a casi 13.000 muertos y 14.800 desaparecidos el balance por el terremoto.