Hace una semana fueron las albóndigas y las salchichas y ahora es la tarta de chocolate y caramelo de Ikea la que está bajo sospecha. La marca sueca ha retirado este postre en las tiendas de 23 países por riesgo de contaminación fecal.
La alerta ha saltado desde China cuyas autoridades sanitarias requisaron a finales del año pasado dos toneladas de este producto tras detectar altos niveles de bacterias coliformes. Este tipo de bacteria se encuentra en el intestino de los hombres y los animales y se expulsa a través de las heces. A las tartas de Ikea podría haber llegado de diferentes maneras. La más lógica la falta de higiene de algún operario encargado de manipular los alimentos.
Portavoces de Ikea aseguran que la bacteria no supone ningún riesgo para la salud pero que sí altera la calidad del producto. Los lotes afectados no han llegado a ninguna de las tiendas que la multinacional sueca tiene en España.
En nuestro país retiraron de la venta las albóndigas y las salchichas que Ikea decidió eliminar del menú de sus restaurantes después de que las autoridades checas detectaran que contenían carne de caballo cuando se vendían como productos elaborados con carne de porcino y bovino.