Termina el luto y la cifra de muertos da lugar a la esperanza. Para llegar hasta aquí han tenido que pasar más de dos meses y medio. Un tiempo de intenso trabajo y sufrimiento para nuestros sanitarios. Uno de los sectores más afectados ha sido el de las residencias de mayores.
Un médico nos ha contado su experiencia. Él ha presenciado la muerte de más de 50 usuarios. Esmédico forense pero Aitor se presentó como voluntario cuando pidieron profesionales sanitarios. Así empieza su lucha en dos residencias de mayores. Y decimos lucha porque él dice haber estado en la guerra.