La CIA desmanteló un plan de Al Qaeda en la Península Arábiga que buscaba cometer un atentado suicida contra un avión en coincidencia con el aniversario de la muerte de Osama Bin Laden.
La casa Blanca ha asegurado que no se ha producido en ningún momento una situación de peligro.
Las autoridades de Estados Unidos han recuperado un artefacto explosivo, que iba a ser utilizado por un terrorista suicida a bordo de un avión de pasajeros. Por razones de seguridad se desconoce si hay algún sospechoso detenido ni dónde fue interceptado el artefacto con el que se pretendía cometer el atentado.
El ataque era similar al que otro terrorista intentó sin éxito, cuando quiso explotar un artefacto oculto en su ropa interior, durante un vuelo a Detroit en las navidades de 2009.
Según la casa Blanca, Barack Obama se encontraba al tanto de esta operación desde el pasado mes de abril, y ha asegurado que en ningún momento representó un riesgo para los estadounidenses. A raíz de esta alerta, el Obama ha pedido al Departamento de Seguridad Nacional, a la policía y a las agencias de inteligencia que tomen todas las medidas necesarias para protegerse contra posibles ataques.