El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha anunciado que el hasta ahora secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho, será el nuevo ministro de Interior, mientras el titular de Fomento, José Blanco, ejercerá también de portavoz del Ejecutivo.
Zapatero ha anunciado además que las vicepresidencias de su Gobierno quedarán reducidas a dos, una para "Asuntos Económicos", que mantendrá Elena Salgado, y otra para Política Territorial, la del hoy vicepresidente tercero Manuel Chaves. Aunque no ha hecho mención al orden de las vicepresidencias, sí ha explicado que en su ausencia será Elena Salgado, hoy vicepresidenta segunda, quien presida el Consejo de Ministros.
El jefe del Ejecutivo ha comparecido en rueda de prensa en la Moncloa para anunciar los cambios derivados de la marcha del Alfredo Pérez Rubalcaba, que ha dejado la cartera de Interior, la portavocía del Gobierno y la vicepresidencia primera para dedicarse en exclusiva a ser candidato del PSOE a la presidencia.
El presidente comunicó los cambios al Rey el pasado miércoles, en su despacho ordinario -dos días antes de que Rubalcaba hiciese pública su renuncia--, según ha relatado él mismo. Rompiendo su costumbre de no desvelar con quién comenta las remodelaciones del Gobierno, Zapatero ha relatado también que "lógicamente" habló de los cambios con Rubalcaba.
El Gobierno en un plano, el PSOE en el otro
No obstante, interrogado sobre si de ahora en adelante compartirá o consultará con él las decisiones de Gobierno, Zapatero ha dejado claro que hay que "tener claros los planos", porque Gobierno y partido trabajan en dos espacios "nítidamente marcados". "El Gobierno gobierna y su tarea apremiante en este momento, el motivo fundamental de su tarea, es el interés general económico del país, y el candidato tiene la tarea de formular su proyecto para las próximas elecciones", ha remachado.
En esa línea, y cuestionado por su opinión sobre el impuesto a la banca que ha propuesto el candidato, Zapatero ha recordado que Rubalcaba ha lanzado esa iniciativa para el momento en que esté culminado el saneamiento del sector y, en todo caso, ha recordado que los partidos siempre hacen propuestas para el marco de la siguiente legislatura. De no tener en cuenta eso siempre cabe preguntar a un partido de gobierno por qué no ha aplicado ya lo que propone en su siguiente programa electoral.
Y sobre si esta remodelación moderada -como él mismo adelantó que sería-- augura un adelanto electoral, Zapatero ha replicado que los cambios sólo indican que "el Gobierno sigue trabajando a pleno rendimiento" y que tiene que trabajar "pisando el acelerador" para cumplir las reformas pendientes por la situación económica y financiera.
"La gran prioridad del Gobierno de España es mantener la estabilidad, ganar la recuperación y crear empleo, ese triple objetivo es tan exigente que no debemos pensar en ninguna otra cuestión", ha remachado.
Según Zapatero, el Gobierno está centrado en "trabajar y cumplir sus compromisos" de consolidación fiscal, reducción de déficit, restructuración del sector financiero y otras reformas, que necesitan "más esfuerzo, todo el esfuerzo y todo el apoyo posible de las fuerzas políticas". Es más, ha puntualizado que estas prioridades son hoy "más razonables que nunca", teniendo en cuenta la nueva oleada de inestabilidad de los mercados y la reunión que se celebra en Bruselas para desbloquear el rescate griego.
Destaca su 'confianza' con Blanco
Sobre la elección concreta de los nuevos cargos, ha dado dos razones para otorgar a Blanco la portavocía, que "conoce bien la acción que el Gobierno está llevando adelante" y que tiene con él "una confianza muy directa, trabada durante mucho tiempo", lo que "facilita sin duda la tarea de ser portavoz".
En cuanto a Camacho, ha destacado su "dilatada trayectoria" como secretario de Estado de Seguridad -lo es desde 2004-- en un Ministerio que ha "cosechado grandes éxitos en la lucha antiterrorista. Camacho, ha resumido Zapatero, ha contribuido a esos éxitos, conoce a fondo la seguridad y en concreto la lucha contra el terrorismo, de manera que tiene un "perfil muy adecuado".
Sin vaticinios sobre ETA
Zapatero no ha querido hacer predicciones sobre si la banda terrorista ETA puede hacer algún anuncio de calado en lo que reste la legislatura: "No se pude ni se debe hacer vaticinios de lo que ETA va a hacer o pueda hacer, nosotros sabemos lo que nosotros vamos a hacer, seguir persiguiendo a ETA con toda nuestra fuerza", ha recalcado.
El presidente ha defendido una vez más que la política antiterrorista del Gobierno y de Interior, "con el respaldo de las fuerzas políticas" y la "encomiable tarea" de Policía Nacional y Guardia Civil es lo que ha llevado a la banda una "debilidad profunda".
El Gobierno, ha asegurado, "va a seguir en una línea de presión, de eficacia", en la persona del nuevo ministro que ya atesora una "responsabilidad importante" en la tarea de los últimos años.